Un estudio de la unidad de nutrición humana de la Universitat Rovira i Virgili (URV) y del Centro de Investigación Biomédica en Red de Obesidad y Nutrición (Ciberobn) otorga un papel fundamental a la dieta o al ejercicio físico.
Por: @alvaro_piqueras
Una nueva investigación conjunta a cargo de la unidad de nutrición humana de la Universitat Rovira i Virgili (URV) y del Centro de Investigación Biomédica en Red de Obesidad y Nutrición (Ciberobn) concluye que los hábitos de vida saludables disminuyen el riesgo de cáncer colorrectal en personas mayores.
Los resultados del estudio ‘Predimed’ (Prevención con Dieta Mediterránea), publicado en la revista ‘Journal of Clinical Medicine’, sugieren una asociación directa entre el estilo de vida y las posibilidades de desarrollar la enfermedad, que supone un importante problema de salud pública a nivel mundial, ya que es el segundo cáncer más común en las mujeres y el tercero en los hombres.
Sin ir más lejos, un trabajo previo a cargo de varios investigadores pertenecientes a diferentes instituciones catalanas y vascas (Oncobell, IDIBELL, ICO e IIS Biodonostia), financiado en parte por la Asociación Española contra el cáncer (AECC), correlaciona la dieta inflamatoria (caracterizada por el consumo de carbohidratos refinados, carne roja y procesada, y grasas saturadas o trans) con el riesgo de padecer no solo cáncer colorrectal, sino también cáncer de mama.
Pero más allá de la alimentación, que es fundamental, la nueva investigación ha tratato de profundizar en la problemática analizando la asociación entre dos índices de estilo de vida y el riesgo de desarrollar cáncer colorrectal en individuos con alto riesgo cardiovascular.
Índices de referencia
El primer índice denominado ‘Índice WCRF/AICR 2018’, evaluaba el cumplimiento de siete de las últimas recomendaciones del WCRF/AICR para la prevención del cáncer:
- Mantener un peso saludable.
- Realizar actividad física.
- Seguir una dieta rica en alimentos integrales, verduras, frutas y legumbres.
- Limitar el consumo de comida rápida y otros alimentos procesados ricos en grasas y azúcares.
- Limitar el consumo de carnes rojas y procesadas.
- Limitar la ingesta de bebidas azucaradas.
- Limitar la ingesta de alcohol.
El segundo índice, propuesto por investigadores de la Universidad de Harvard (EE. UU.) en 2018, se denominó ‘Índice de Estilo de Vida de Bajo Riesgo’ y se centra en 5 factores de estilo de vida saludables:
- No fumar.
- No ingerir alcohol.
- Realizar actividad física regularmente.
- Mantener un índice de masa corporal adecuado.
- Seguir una dieta saludable.
“Después de analizar datos de 7.216 participantes de 55 a 80 años que fueron estudiados durante 6 años, se observó que aquellos individuos que presentaban una mayor adherencia a las recomendaciones específicas para la prevención del cáncer (seguimiento de al menos 5 recomendaciones de las 7 consideradas), presentaban un 48% menos riesgo de desarrollar cáncer colorrectal en comparación con aquellos con una menor adherencia. Asimismo, también se observó que una mayor adhesión a un estilo de vida saludable, valorado mediante el índice de estilo de vida de bajo riesgo (cumplir con más de 3 de las 5 recomendaciones), se asociaba con un 52% menos riesgo de desarrollar este cáncer”, destacan los investigadores en un comunicado.
Bebidas azucaradas
En lo que refiere ‘Índice WCRF/AICR 2018’, de todas las recomendaciones de prevención de cáncer, la que mostró una mayor asociación con el riesgo de cáncer colorrectal fue el consumo de bebidas azucaradas. Así, se observó que aquellos participantes con un mayor consumo de estas bebidas (>250 ml/día, equivalente a más de un vaso al día) mostraban un 58% más de riesgo de cáncer colorrectal en comparación con los que no las consumían.
Tomado de: www.eldiariocolombiano.com
